miércoles, 24 de junio de 2009

La Predicción

- Tú, el rudo-sama- Exhorto la vieja desdentada y chillona - acercate - su nudosas manos acariciaban y agitaban huesos de pequeños animalillos.

Mientras Nagatora se acercaba Yusuke miraba fijamente los movimientos de la anciana. La voz extridente y aguda de la octogenaria impediría a un alto noble realizar una ceremonia del té, sus ropas andrajosas desprendían un olor metálico... bastante desagradable sin embargo había algo en la ancianda que le inquietaba y a la vez le atraía a escuchar la predicciones que tenía que ofrecerles.

- Mi nombre es Tadashima Nagatora, hijo de Tadashima Shigeru. No vuelvas a faltarme el respecto onna o deberé tomar tu vida - El joven samurai tenía un semblante serio, sombrío. Su compañero, Yusuke, sabía muy bien que no era rudeza lo que ocultaba sino miedo. A Nagatora le espantaban los hechos paranormales y esto hacía que se mostrase tosco e inquieto.

- Tranquilo Samurai-sama. En breve vuestras cinco monedas de plata habrán dado su jugo y ni vos ni yo deberemos preocuparnos del otro - La vieja entono dicha frase tratando de ser cordial e intento firmar la misma con una sonrisa que lejos de tranquilizar le hacía adoptar una mueca horrible que hizo recorrer un escalofrío por la espalda a Nagatora.

Dicho lo anterior la anciana arrojo abruptamente los huesos al tazón de barro que se hallaba frente a ella. La pequeñas estructuras oseas chocaron contra el barro y algunas incluso giraron en la redondez del mismo haciendo un curioso sonido. Cuando todos los huesos se aposentaron en la amplia base del tazón la vieja se quedo mirandolos durante unos momentos.

-Ah... - dijo la anciana entre susurros -¿que?- inquirió Nagatora con expresión de apremio en su rostro. Yusuke se limitaba a observar atentamente pero no podía evitar sentirse igualmente impaciente.

La vieja octogenaria empezo a hablar muy despacio, incluso su tono de voz parecía ahora mas grave - Tu familia, tu nombre... dentro de tres años lucharas... no por defenderlos sino por tu propia voluntad. No albergues sueños, no albergues esperanza... lo que no ha sido nunca podrá ser.-

Despues se hizo el silencio tras unos instantes eternos Nagatora rompió el silencio - ¿Y que quiere decir eso?- la mujer alzo sus hombros y le dedico una mirada de inocente ignorancia - Tadashima Nagatora, hijo de Tadashima Shigeru, las predicciones son abstractas y en la mayoría de los casos no parecen tener significado hasta que se cumplen -

- Pues vaya. Vamonos Yu-chan, has tirado el dinero - dijo Nagatora mientras se daba vuelta y se encaminaba hacía el festival. - No estoy de acuerdo Naga-san además nos quedan dos predicciones, ¿no?-

La anciana asintió, le miró fijamente y volvió a coger los huesos del tazón.

Capítulo 3

2 comentarios:

Thanos_Malkav dijo...

Curioso... ya veremos como sigue.

Javier Santamaría dijo...

Pero leete las primeras partes condenado :P

Trataremos de escribir de vez en cuando que sabemos que es algo que nos gusta a los dos y para lo que pocas veces sacamos el tiempo que nos gustaría.

Un saludo